"Apagar el fuego"

Señor Director:

"El 22 de enero de 1974 el presidente de la Nación y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Juan D. Perón, con motivo del criminal ataque subversivo a la guarnición de Azul, donde fueron asesinados su jefe el coronel Gay y su esposa en presencia de sus hijos, ordenó el "exterminio de los terroristas para bien de la República".

"El 5 de febrero de 1975, la presidenta de la Nación, Isabel Perón, en ejercicio de las atribuciones del Poder Ejecutivo Nacional, encomendó a las Fuerzas Armadas y de seguridad el ¨aniquilamiento de las organizaciones terroristas".

"El 6 de octubre de 1975, el presidente interino Italo Luder, mediante decreto que refrendaron - entre otros - Antonio Cafiero y Carlos Ruckauf extendió la orden de ¨aniquilamiento¨ a todo el territorio argentino.

"El 10 de diciembre de 1983 asume la Presidencia de la Nación el Dr. Raúl Alfonsín, después de insultar y agraviar, desde Roma, París y México a las FFAA de su país.

"Días después, violando la Constitución nacional, por medio del decreto 158/83 y la ley 23.049, hizo de cuenta que la represión del terrorismo se había iniciado el 24 de marzo de 1976, por iniciativa de los comandantes en jefe. Se sustanció así, un juicio inconstitucional, irregular, ideológico, político y perverso en el que se condenó al Tte. Gral. Videla a las máximas penas previstas en el Código Penal.

"Con esa condena debió cesar la persecución contra el Tte. Gral. Videla. Pero no fue así. Quince años después de su condena, el 9 de junio de 1998, irrumpió en su domicilio, exhibiendo una arbitraria orden de allanamiento expedida por un juez de San Isidro, una comisión policial que procedió a detenerlo e incomunicarlo.

"Con posterioridad, los jueces de primera y segunda instancia convalidaron tan abusivo proceder, prescindiendo de que los hechos ya habían sido juzgados en 1984 y, a todo evento, se encontraban prescriptos.

"Poco después, se le abrió al Tte. Gral. Videla un nuevo proceso invocando un supuesto Plan Cóndor, desconociendo la cosa juzgada y la prescripción, ambas sancionadas por un gobierno constitucional y aplicadas en reiterados casos por la Corte Suprema de Justicia.

"El Tte. Gral. Videla se encuentra ilegalmente privado de su libertad desde hace más de cuatro años en violación a todas las normas constitucionales y procesales vigentes.

"El empeño en buscar cauces judiciales al odio y al rencor ha movido a que arbitrariedades análogas se hayan cometido con posterioridad contra otros jefes militares, a pesar de que todas las acciones penales intentadas se encuentran irreversiblemente extinguidas.

"Señor Director: hay que apagar el fuego antes de que se convierta en un incendio que acentúe el proceso de desintegración en que se encuentra nuestra patria. Seguir atacando injusta y vilmente a las FFAA es alejarnos cada vez más del camino de la paz y la concordia. La reconciliación es una "utopía".

Mario H. Laprida

General de brigada (RE)

Gaspar Campos 1686 - Bella Vista - Bs. As.

¨Almirantes retirados cuestionan a Bonadío¨

- Por la detención de 36 militares -

El ´Grupo de Almirantes Retirados´ advirtió ayer que "tratar de revivir épocas pasadas desde visiones exclusivamente ideológicas no ha resultado nunca conducente a la pacificación nacional" en relación con la decisión del juez federal Claudio Bonadío de imponer prisión a 36 militares retirados en una causa en que se investiga la desaparición de 18 montoneros a principios de la década del 80.

Así se aseguró en un documento firmado por el presidente de esa agrupación, el vicealmirante retirado Juan Carlos Bou, por el cual además se adhiere al comunicado difundido en ese mismo sentido por el ´Foro de Generales Retirados´.

El ´Foro de Generales Retirados´ había advertido que la actitud del juez Bonadío significaba una "lamentable agresión institucional, a priori se pone en tela de juicio el buen nombre y honor de miembros del Ejército Argentino, responsabilizándolos de presuntos hechos ocurridos hace más de un cuarto de siglo, actualizando con ello la virulenta campaña que se inició el 10 de diciembre para descalificar a las Fuerzas Armadas por su participación en la guerra provocada por el terrorismo subversivo".

"Más fútbol"

Señor Director:

"No tengo nada contra el fútbol. Después de la carta del 5 de julio infinidad de lectores de LA NACION me explicaron que una buena jugada puede resultar más bella que una escultura de Bernini.

"Mario Pergolini lanzó un nuevo programa de televisión sobre jóvenes ilusionados con triunfar a través del fútbol. Adolescentes que no saben leer le dicen: "Mirame los pies, yo sé jugar a la pelota".

"¿Resultará más provechoso para nuestro país enseñarles a leer o premiarlos por jugar bien a la pelota?"

Opinión: "Tres poderes en crisis"

por Ernesto O´Farrell

Los tres poderes del Estado atraviesan una profunda crisis. En sus integrantes parece prevalecer una mayor preocupación por su futuro personal que por el del cuerpo que integran, y constantemente incurren en cambios y vacilaciones respecto de cuestiones fundamentales para el futuro.

Tomemos como primer ejemplo la remanida y trajinada acusación a los nueve jueces de la Corte Suprema, propuesta por un grupo de diputados, que no termina de definirse y nos brinda un nuevo suspenso por semana, al estilo de las series cinematográficas que apasionaban a los jóvenes de varias décadas atrás. Tal proceder descalifica, a mi modo de ver, todo lo actuado hasta el presente, lo que por cierto no implica que puedan concretarse cargos serios en el futuro, pero hasta ahora no han sido claramente enunciados.

En el Poder Judicial también parece haber un mayor interés por la carrera futura de los magistrados que por atender los procesos a su cargo. Esto está mucho más difundido en el fuero penal, cuyos integrantes parecen haber despertado de un largo letargo y comienzan a juzgar ahora hechos ocurridos y conocidos desde hace más o menos un par de décadas, durante las cuales poco o nada se hizo al respecto.

En cuanto al Poder Ejecutivo, pese a su carácter provisional, no se privó de impulsar e imponer leyes que han desquiciado los principios generales del derecho y también la economía nacional. Quizás el presidente haya cumplido alguna de las muchas promesas que formuló, pero si así fuera, el hecho pasó para mí desapercibido. También buscando refugio para el futuro, corona su gestión acortando el plazo por el cual se lo designó, evidente reconocimiento de su incapacidad para afrontar la tarea para la cual fue nombrado.

No es de extrañar que si los que nos dirigen están desorientados o simplemente se desentienden de sus obligaciones, los argentinos nos sintamos llevados a la deriva por fuerzas que ni siquiera conocemos.

La única salida posible es respetar a rajatabla la Constitución, y en especial ocuparse del bienestar general en vez del bienestar personal, respecto a lo cual me parece muy atinada la contribución de La Nación titulada "El diálogo somos todos", publicada el 14 de julio, a lo que añadiría que con la mayor urgencia encaren los problemas atinentes a la salud y la educación, pilares sin los cuales el país no podrá retomar la senda del progreso.

Un clima de vasta irrealidad dominó la semana política, al extremo de tornar inútil el análisis por falta de hechos reales que fuese posible vincular entre sí. De un lado, campaña electoral desencadenada como si fueran las últimas semanas previas al comicio, con ese juego de las acusaciones incomprobables para el hombre de la calle.

De otra parte, a dos meses de haber proclamado el adelantamiento de las elecciones, faltan aún los decretos reglamentarios de las "internas abiertas", y hasta la convocatoria para los comicios presidenciales, cosa que se viene dilatando.

Esto impide cualquier tipo de estrategia para una fuerza o núcleo de partidos. ¿Deberán hacer una "interna abierta"? Entonces, ¿el que gana va como candidato y el segundo, de vice? O bien se vota fórmulas y la que gana anula a las otras... ¡No se sabe! Otros piensan que van separados y se unen en la segunda vuelta. Imposible planear algo. Hubo que diferir la reunión de El Chocón. Lo mismo reza para la liga presunta de Izquierda Unida con Luis Zamora.

¿Por qué no hay ley electoral ya? Porque la Constitución vigente es (erróneamente) taxativa. Dice que el comicio presidencial tiene que hacerse dos meses antes de la entrega del mando. Y la entrega del mando es el 10 de diciembre de 2003, exactamente cuatro años después de la asunción de Fernando de la Rúa, cuyo período ahora completa Eduardo Duhalde.

Esto es propio de la chapuza de Raúl Alfonsín y Carlos Corach que, en 1994, sujetaron la elección a la jura del mando, y no al revés, como sería más lógico y natural. Lo cierto es que, sin una reforma constitucional, no puede adelantarse los comicios.

Al margen está la camorra política con las acusaciones a Carlos Menem, y a su ex secretario privado Ramón Hernández, de tener unas cuentas no declaradas en Suiza. El juez que entiende en la denuncia ha girado un exhorto para que se levante el secreto bancario que protege a tales cuentas. Pero la justicia helvética es celosa al respecto: reclama que se haya probado en forma previa, en jurisdicción argentina, una comisión de delito por los protagonistas. Ahora bien: hay en la Argentina varias causas, donde los nombres de Menem y Hernández están en danza, pero en ninguna se han agotado las instancias ni se ha llegado a probar algo.

Aquí la que está en mora es la justicia argentina, por lo que resulta difícil que Suiza levante el secreto bancario sobre cuenta alguna de Menem. Y nunca tan rápido que pueda impedir que participe en la "interna abierta" del justicialismo, como supone Hilda Duhalde.

La pareja presidencial saliente tomó partido abiertamente contra Menem, finalizando la mascarada de la prescindencia preelectoral.

Toda esta camorra electoral tiende a la magia: hacernos creer que si votamos ¡click! se acaban todos los problemas. Sabemos bien que al asumir el nuevo mandatario, los problemas recién empiezan. Se precisaría contar con un programa de unión nacional, para ponerlo en práctica no bien se normalice la forma política.

Ese programa de unidad es lo que buscó el Diálogo Social, ya fracasado.

"Felicetti"

Señor Director:

"Un subversivo del Movimiento Todos por la Patria (MTP), condenado por asesinato (entre otros, el del soldado Tadeo Tadía, que sólo tenía una escoba en la mano), en la toma del cuartel de La Tablada (1989), a prisión perpetua con accesoria de reclusión por tiempo indeterminado. La más severa.

"De la Rúa conmutó la pena a 25 años de prisión. Nuestra legislación pro delincuencia lo habilita para que, cumplido el 50% de la pena, solicite salidas transitorias-laborales.

"Lo hace. Se la concede el juez Leiva, integrante del Tribunal Oral de San Martín, a cargo de la ejecución de la pena. Hasta acá sólo podríamos cuestionar la legislación, pero es lo que tenemos y se debe cumplir. Pero ya que hablamos de cumplir la ley, veamos lo que pasó.

"Por resolución 523 del 21 de mayo del actual, el decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Félix Gustavo Schuster, lo contrata para desempeñarse en la Secretaría de Extensión Universitaria y Bienestar Estudiantil, con sueldo a cargo del presupuesto vigente.

"Reacción de algún medio: "Es una vergüenza, es una barbaridad que a un asesino como éste se lo contrate en una facultad dependiente de la Universidad Nacional y que todos paguemos el sueldo con nuestros impuestos".

"Es cierto, pero además, esta contratación es un delito. Explico:

1°- la prisión o reclusión por más de 3 años conlleva la inhabilitación absoluta, por el tiempo de la condena (artículo 12 del Código Penal);

 

2°- la inhabilitación absoluta importa la incapacidad para obtener empleos públicos (artículo 19, inciso 3), y

 

3°- quien realice la designación o nombramiento de quien no cumpliera los requisitos legales para el cargo, será pasible de la pena de inhabilitación de entre 6 meses y 2 años y la misma pena a quien acepte el cargo.

"Conclusión: si fuéramos un país serio y respetuoso de la ley deberíamos bregar para que se cumpla, y por ende, el decano de la Facultad de Filosofía debería, cuando menos, renunciar o ser desplazado de su cargo.

Felicetti ser privado del beneficio de las salidas transitorias por haber cometido otro delito y no, como parece decir ahora el juez Leiva, que le revocó el beneficio "por no haber cumplido su palabra de honor", ya que le dijo que trabaja en una empresa constructora, lo que demuestra, además, que ni el juez Leiva ni el fiscal Pedro García tienen idea de que se ha cometido un delito en la designación.

"Esta designación para un empleo público a un subversivo y asesino que atentó contra las instituciones democráticas se da en un país con un índice de desocupación que me releva de cualquier comentario."

"¿No se lo puede tocar?"

Señor Director:

"En la sección Economía del 27 del actual, con el título "El empleo sólo crece en el Estado", se amplía la información de la portada de ´La Nación´ con respecto a, entre otras, que la construcción cayó un 51,2% en los últimos 12 meses. Si consideramos que la comparación está hecha sobre 2001, año ya de por sí muy malo, estimo que la caída del sector debe ser superior al 80% en los últimos dos años.

"Mientras el Gobierno sigue navegando en la nebulosa, las dudas y las medias tintas, no se hace nada para mejorar la situación de este sector, generador fundamental de empleos, tanto para profesionales, ingenieros y arquitectos como para los muchos empleados administrativos del sector, como para las empresas proveedoras vinculadas y, más aún, para la enorme cantidad de mano de obra, hoy desocupada, que conlleva la actividad.

"Lo curioso es que en la misma nota se nos informa que "fue el sector privado el que produjo el ajuste, mientras que la administración pública siguió incrementando su número de empleados asalariados". Me pregunto hasta cuándo van a cargar al sector privado y, fundamentalmente, qué político se atreverá a derogar la reglamentación que obliga la inamovilidad del empleo público.

"¿Con qué derecho, mientras a un empleado privado lo despiden si es incompetente, a un empleado público, entre quienes seguramente habrá muchos buenos, no se lo puede tocar?"

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"La Argentina no está en crisis, está en decadencia"

En su reflexión semanal en el programa televisivo "Claves para un Mundo Mejor", Mons. Héctor Aguer - Arzobispo de La Plata - afirmó que "la Argentina no está en crisis sino en decadencia". Leamos la versión completa de su alocución televisiva:

"He oído decir muchas veces que la Argentina vive la crisis más grande de su historia. Se dice que estamos en crisis".

"En realidad habría que preguntarse si se puede denominar crisis a una situación tan duradera. Crisis viene de un verbo griego que significa separar, distinguir, juzgar. Es un momento o una etapa en la que se deciden grandes cosas. Por ejemplo en la adolescencia o la primera juventud cuando un muchacho o una chica tienen que decidir que quieren llegar a ser en la vida. O cuando uno esta entrando en años, el envejecimiento se va a aceptar bien o si se va a optar por una especie de rejuvenecimiento artificial y de lifting".

"La crisis es algo momentáneo y nuestra situación es de estancamiento y merecería otro nombre: decadencia. La Argentina no está en crisis sino en decadencia".

"Es duro decir esto pero creo que es la verdad. La decadencia significa declinación, menoscabo, principio de debilidad y de ruina. En nuestra sociedad asistimos a la desvalorización de todo lo que fue valioso alguna vez: honestidad, respeto de las normas elementales de convivencia, laboriosidad, austeridad, sentido de la justicia, interés por el bien común, grandeza de alma".

"Se trata de un problema de valores. La crisis no es solo económica, ni siquiera sólo una crisis de la dirigencia política. Es una crisis cultural y, más profundamente, una crisis moral y religiosa".

"Esto que parece ser el diagnostico de un gran mal nos permite recordar que a grandes males grandes remedios. Entonces: ¿qué es lo que debemos movilizar para salir de esta situación de decadencia? Creo que necesitamos poner atención a las cuestiones fundamentales, a los valores elementales que son los que pueden ir como recreando la realidad de nuestra cultura vivida. Esto es posible, y hay que comenzar por la persona, por la familia, por las instituciones del tercer sector, por todos aquellos que se interesan hoy por esta decadencia argentina".

"A veces la reacción es crispada con una cierta cuota de desamor y de lo que se trata es de poner amor. Amor a toda la verdad, amor a todo el bien, amor a todo aquello que fue patrimonio de la Argentina alguna vez".

"No podemos hablar de épocas doradas porque nuestra historia es breve, accidentada y sangrienta. No hubo épocas doradas, pero todos conocimos épocas mejores por la vigencia de estos valores fundamentales que hacen a la dignidad de la persona humana, son los que dan sentido a la convivencia social y permiten a una sociedad determinada augurarle un futuro".

"Manos al trabajo pues, corazón al trabajo, alma al trabajo, a la recreación de estos valores humanos, cristianos y argentinos para salir de esta decadencia que vivimos".